BARRIADA DE BELÉN - IQUITOS - PERÚ

BARRIADA DE BELÉN - IQUITOS - PERÚ
UN MINUTO DE FILOSOFÍA: “LOS SUEÑOS Y LOS RETOS ANIMAN EL CAMINAR"

domingo, 28 de marzo de 2021

 

 

SEMANA SANTA: ALGUNAS REFLEXIONES

Para los cristianos es la semana grande. Durante estos días, quienes seguimos a Jesucristo, tenemos la ocasión de recordar los últimos días de la vida de Jesús de Nazaret.
Cuentan los evangelios que “pasó haciendo el bien”. Sin embargo lo mataron en la cruz. Pero, antes de matarlo, lo torturaron, lo vejaron, le insultaron,… y, encima, le crucificaron entre dos ladrones. Murió como un excluido, rechazado por la sociedad y por la religión de su tiempo. Señalado como maldito, por las autoridades religiosas y políticas. Le crucificaron como a un malhechor y como persona “non grata” en el sistema.
Los entendidos, dicen que se ganó a pulso su muerte. Que la vida que llevó no podía acabar de otra forma. Pero la vida que llevó, resulta, que estuvo –toda ella- comprometida por los pobres y las víctimas de la sociedad en la que le tocó vivir. Su pasión por los pobres –no para ser pobres como ellos, sino para liberarles de su pobreza y humanizarles como personas, le acarrearon múltiples problemas.
Él mismo, lo proclamó al inicio de su misión: “El Espíritu del Señor está sobre mí, porque él me ha ungido para que dé la Buena Noticia a los pobres; me ha enviado a anunciar la libertad a los cautivos y la vista a los ciegos, para poner en libertad a los oprimidos, para proclamar el año de gracia del Señor”. (Lc 4,18-19)
Y guiado por ese mismo espíritu, empeñó el resto de su existencia a favor de los que no cuentan en la sociedad y son rechazados, por la misma, de mil maneras.
La Buena Noticia que les anunciaba pretendía abrirles puertas, ilusionarles con una vida llena de esperanza, y hacerles ver que la felicidad, también, era para ellos. Simultáneamente, las denuncias que hacía a los ricos, poner en evidencia y desenmascarar las hipocresías de los hombres de la religión oficial, y señalar a las diversas autoridades como culpables de dicha situación , le fueron creando múltiples dificultades. Su coherencia -hasta el final-, le llevó a la muerte.
Pero la Semana Santa no acaba con la muerte de Jesús. Desde nuestra fe, esta semana de pasión y muerte, termina con la resurrección. No hay que olvidarlo. La apuesta de Jesús por una humanidad nueva, no fue en vano. Con su resurrección validó todo lo que había sido su vida, y podríamos afirmar, que invalidó todo aquello, de la sociedad y la religión, que influyó en su muerte.
Por consiguiente, pienso, que si recordamos todas estas cosas en Semana Santa, sobre todo, cuando salgamos a ver las procesiones a las calles, en las que se representan los distintos misterios de la pasión, muerte y resurrección de Jesús, tiene que ser con la idea de continuar con la Misión de Jesús. 
Sin la menor duda, en el siglo XXI, la sociedad y el sistema global, en el que vivimos, sigue generando pobres, marginados, excluidos, seres humanos que se mueren de hambre, o violentamente en las guerras. Sigue habiendo enfermos, inmigrantes y extranjeros, presos,… todos ellos rechazados y olvidados por la misma sociedad que los ha creado.
Sin duda, Jesús seguiría tomando partido por todos ellos y, entonces, quienes decimos que seguimos a Jesús, no nos cabe otra salida que hacer lo mismo… si deseamos seguirle, claro: ¡Pasión, muerte y… resurrección!

domingo, 21 de marzo de 2021

LOS POLÍTICOS ¿HIJOS LEGÍTIMOS O ILEGÍTIMOS DE LA SOCIEDAD?

Es una pena, pero están insoportables. Los hemos elegidos para resolver los problemas de la sociedad, y resulta, que están empeñados en crear muchos más problemas de los que ya tenemos.

En el fondo, cada sociedad tiene los políticos que se merece, parecida frase la he escuchado en la radio, en relación a otros asuntos, y estoy de acuerdo en lo que a nuestros políticos se refiere.. 

Que son nuestros hijos, nadie lo discute. Por consiguiente son legítimos. Pero se están aplicando cada día para ellos mismos, deslegitimarse. Son o se han vuelto malos hijos. Es una pena, porqué conozco a bastantes políticos que son excelentes y buenas personas y que se esfuerzan por hacer muy bien sus tareas. No hacen mucho ruido en sus obligaciones. Éstos es una pena que no estén en los puestos claves de los partidos. Me imagino que en el margen que tienen ejercerán la 'oportuna crítica' entre sus filas.

Por la edad que tengo, voté la constitución que tenemos y en las primeras elecciones. He visto, escuchado y leído mucho de lo que han dicho y han hecho los políticos. Siempre han existido los rifirrafes, pero tanto ensañamiento, insultos, despropósitos (desde la extrema izquierda, hasta la extrema derecha  pasando por el llamado centro) nunca los visto. 

Pero claro, los políticos, nos representan. Son de nuestra misma madera, están hechos a nuestra imagen, luego si aplicamos el arte del silogismo, no quiero decir más.

Naturalmente, que si hay elecciones tiene que gobernar la mayoría, pero no por ser la mayoría tienen la verdad en todos los asuntos que conciernen a la sociedad entera. Digo yo, que las minorías, tendrán algo que decir en asuntos que nos afectan a todos. 

Lo del bien común, lo del consenso después de un laborioso diálogo, lo de crear puentes para transitar todo el mundo, creo que lo habrán estudiado en alguna asignatura en la carrera universitaria que han hecho. Porque estos asuntos para cuando son. Un ejemplo que clama al cielo es la EDUCACIÓN EN ESPAÑA. Por lo que venimos constatando las leyes educativas no son para todos los españoles, sino para el partido que gobierna y sus afines. Así nos va.

Pero lo que da vergüenza ajena, son los insultos. Se justifican -todos- diciendo que en la libertad de expresión tienen cabida las palabras 'gruesas' que se dirigen, pero tales groserías no tienen justificación lo diga quién lo diga y aunque esté en las leyes. Están para construir, progresar en el bien común de toda la sociedad, no para destrozarla.

A veces pienso, y me pregunto ¿y si los políticos son la imagen que refleja el espejo de la sociedad?

Para mí, que la buena educación, que debería ser la máxima preocupación de la sociedad, para facilitar la buena convivencia y el respeto entre los ciudadanos, no está suficientemente valorada, tanto en el seno de las instituciones sociales (empezando por las familias) como en en el buen hacer que se espera de los políticos en su ejercicio cotidiano.

Sigo creyendo en la política. Sigo creyendo en los políticos. Aunque nos que mucho por hacer. Nos estamos jugando el futuro.

domingo, 14 de marzo de 2021

DE LOS TRES AMORES DE MI VIDA



 La Cuaresma nos invita, como un espejo, a mirar con atención nuestra realidad personal, en el caso del espejo, miramos nuestra imagen externa (la que ven los demás), en el caso de la cuaresma , la mirada es hacia nuestro interior (la vemos nosotros solos).

Es un tiempo , la Cuaresma, que nos confronta e interpela, bueno, para el que quiere confrontarse e interpelarse, que no todo el mundo está por la labor.

La vida me está llevando a simplificar las cosas, no es fácil, hay que tener determinación, como en todo lo que nos pasa y somos; en este caso, mi preocupación es plantear las cosas fundamentales, o sea, las que fundamentan mi vida y, una vez definidas, ver cómo las estoy traduciendo en mi vida, en el día a día.

Como sabemos, la alternativa que presentamos los que seguimos a Jesús, se basa en el mandamiento del Amor. Es el amor y nada más que el amor, la medida de nuestra vida cristiana. Por eso que no es una novedad lo que voy a señalar en estas líneas dominicales. Lo novedoso es que, para mi camino cuaresmal, me recuerdo a mí mismo, la importancia que tienen los tres amores de mi vida y cómo estoy amando a cada uno de ellos. Al día de hoy lo percibo así:

Mi primer amor es Juan Bautista. Mal empezamos sino me quiero, sino me amo. No es fácil este primer amor. En estos tiempos que vivimos, lo que digan los  influencers , cuenta más que tus propias convicciones, y con tantas llamadas que nos llegan de fuera que predican la comodidad, el consumismo, la egolatría, la verdad que no te favorecen el que hagas una buena reflexión sobre cómo va tu crecimiento personal. Porque las incoherencias hay que desenmascararlas, la aceptación de las propias limitaciones no es fácil, perdonarse cuando uno es consciente de haber metido la pata tiene su coraje y tratar de superarse ante el desánimo que te llega, requiere mucha determinación. este primer amor requiere de tiempo y paciencia.

Mi segundo amor son Los Demás. por los demás entiendo la familia, la comunidad en la que vivo, mis amigos, compañeros de trabajo, vecinos, las personas que me vienen de otros continentes sean negros o blancos, ricos o pobres, creyentes o no creyentes, y como no, la misma naturaleza, la casa común en la que habitamos. Como decíamos antes, hay muchas llamadas externas que no favorecen la cultura del encuentro, al revés, te plantean que es mejor desentenderse del mundo que te rodea, como dice el refranero, 'que cada cual aguante su vela', tú vete a lo tuyo y practica la indiferencia, así no te complicas la vida. Los demás, en todo caso, están para aprovecharse de ellos. Mal asunto. Amar en este caso, conlleva la hospitalidad, el diálogo, la comunicación, el respeto, la integración, el perdón, y todo aquello que favorece la convivencia y la solidaridad. Esto tiene tela.

Mi tercer amor es Dios. Sí, soy creyente. Muchas de las personas con las que vivo, también lo son. Para mí creer en Dios lo es todo. Es más los otros dos amores que acabo de señalar, no los interpretaría de la misma forma, si no fuera creyente. Como nos enseñó Jesús de Nazaret, mi Dios es padre y madre,  y siento que me ama y quiere que sus hijos seamos felices. Por eso entiendo que el amor a Dios pasa por el amor a sus hijos e hijas. Su sueño es que su familia sea plena, por eso comprometerse a construir la fraternidad es la mejor expresión del amor al Dios de Jesús. Ahí están las Bienaventuranzas es la mejor propuesta que me presenta Dios para que le ame con la totalidad de mi vida. Yo quiere ser ese hijo que se comprometa a ello. Seguro que la oración me va a seguir ayudando

¡Ojalá! estos tres amores los siga manteniendo, cuidando y amando como se merecen.


domingo, 7 de marzo de 2021

MI HOMENAJE A TODAS LAS MUJERES DE AHORA Y DE TODOS LOS TIEMPOS

 


La mujer, desde su nacimiento, ya está estigmatizada. Casi todas las culturas y religiones la tienen discriminada, en mayor o menor medida. Durante siglos, mejor dicho, durante milenios, la mujer siempre se ha llevado la peor parte en este planeta que habitamos. Por consiguiente voy a partir justificando este día dedicado a la mujer. ¡Ya era hora!

El Día internacional de la mujer (trabajadora), la verdad es que no está muy claro su origen. Difieren hasta las distintas fuentes, Ni siquiera en el título se ponen de acuerdo. En todo caso, hay consenso en aceptar que, a finales del siglo XIX y los primeros años del siglo XX, fue surgiendo, en el mundo laboral, un movimiento reivindicativo por parte de las mujeres, para alcanzar la igualdad con los hombres. Esta situación se fue extendiendo a todos los ámbitos de la esfera social. En España hay que esperar a 1978, para que las leyes regulen sobre la igualdad entre los hombres y las mujeres.

Y Qué nos dice la ONU que, desde su fundación, está liderando este proceso de liberación e igualdad entre la mujer y el hombre: “La Carta de las Naciones Unidas, firmada en San Francisco en 1945, fue el primer acuerdo internacional que proclamó que la igualdad de los sexos era un derecho humano fundamental. Desde entonces, la Organización ha contribuido a crear un legado histórico de estrategias, normas, programas y objetivos concertados internacionalmente para mejorar la condición de la mujer en todo el mundo”. 

Dando un paso más, vemos que en el siglo XXI, aún, no podemos cantar victoria. Sí, hemos avanzado un poquito, no lo vamos a negar, pero un poquito. Incluso en las sociedades que llamamos “avanzadas”, “desarrolladas”, “del primer mundo”… lo de la igualdad plena… está por llegar. Y no me siento pesimista. ¡Cuidado! Que no soy feminista radical. Soy un hombre que cree en la igualdad de todos los seres humanos, sean hombres o mujeres, negros y blancos, cristianos y budistas, ateas y musulmanes, pobres y ricos… afirmo -en todas las personas- la misma dignidad y los mismos derechos.

Les confieso que me gusta, cuando puedo, consultar la prensa digital, ver los telediarios, oír la radio y sigo constatando -LAMENTABLEMENTE- que a lo largo y a lo ancho del planeta: 

  • las mujeres son víctimas mortales a manos de sus parejas (machismo);
  • el analfabetismo tiene mayor incidencia en las mujeres;
  • se les sigue mutilando como si fueran animales (ablación del clítoris);
  • no se les da el mismo protagonismo que a los hombres en muchas religiones (por ejemplo la cristiana);
  • en las guerras son violadas y maltratadas;
  • el sueldo sigue siendo menor al de los hombres, aunque trabajan igual o más que ellos;
  • son utilizadas y vendidas como esclavas sexuales (desde su más tierna infancia);
  • el derecho al voto no lo han conseguido en numerosos países;
  • nacer mujer sigue siendo una desgracia en bastantes familias;
  • son encontradas asesinadas en las cunetas o en al campo en países latinoamericanos… para que seguir.

Sin duda, me dirán  que algunas “féminas”… ¡Son de cuidado! Y no se lo voy a negar... “porque son algunas mujeres”; pero en comparación con los millones de mujeres que existen en el mundo, en la situación que acabo de enumerar, se merecen que al menos, un día en el año de forma especial, las recordemos, las honremos y las tengamos en cuenta para que no bajemos la guardia.

Desde este Blog, animo a que sigamos trabajando por la igualdad de los hombres y las mujeres de todo el mundo, eso sí, todos los días del año. La casa común que estamos construyendo, con la globalización, no se podrá mantener en pie sin esta anhelada y deseada igualdad.