BARRIADA DE BELÉN - IQUITOS - PERÚ

BARRIADA DE BELÉN - IQUITOS - PERÚ
UN MINUTO DE FILOSOFÍA: “LOS SUEÑOS Y LOS RETOS ANIMAN EL CAMINAR"

domingo, 1 de enero de 2012

SÍ A LA VIDA, NO A LA MUERTE PROVOCADA

Digamos que son mis deseos para el 2012.



Estamos ante las grandes paradojas de la historia humana. Unas personas defienden unas cosas y otras personas apuestan por las contrarias. Por mi parte, me sitúo en el SÍ, y rechazo, de plano, el NO. Es cuestión de opciones y ésta es la enumeración que se me ocurre:


Sí a la paz duradera. No a la guerra cruel.
Sí al cariño y la ternura. No al machismo puro y duro.


Sí al respeto y la tolerancia. No a la discriminación y el racismo.
Sí al diálogo constructivo. No a la imposición autoritaria.
Sí a la solidaridad que nos hermana. No a la avaricia y usura neoliberales.



Sí a la indignación por un mundo más justo. No a la indiferencia que nos aísla.
Sí a la sexualidad que humaniza. No al sexo que deshumaniza.
Sí al amor que nos vincula. No al odio que nos separa.
Sí a las medicinas que nos curan. No a las drogas que nos matan.
Sí a la justicia y al derecho. No a las injusticias y los privilegios.
Sí a la amistad gratificante. No a la enemistad que rompe vínculos.
Sí a la familia que nos fortalece. No a la desestructuración familiar.
Sí al compañerismo constructivo. No a la competencia desleal.
Sí a la fraternidad universal. No a la venganza destructora.
Sí al compartir con los pobres y desfavorecidos. No al egoísmo inhumano.
Sí a la democracia de los pueblos. No a las dictaduras del signo que sean.
Sí a la libertad y la verdad. No a la esclavitud y la mentira.
Sí a la transparencia y coherencia. No a la hipocresía e incoherencia.
Sí a la igualad del hombre y la mujer. No a las castas y desigualdades sociales.
Sí a la libertad de expresión y de creencias. No a los intolerantes y censores.
Sí a la infancia protegida. No a la explotación, vejación y abusos infantiles.
Sí a la igualdad de todos. No a la trata y tráfico de personas blancas o negras.
Sí a una economía al servicio del hombre. No a la economía que discrimina y explota.



Sí a la política del bienestar para todos. No a los políticos que buscan sus intereses.
Sí a los trabajadores honrados y honestos. No a los chanchullos y economía sumergida.
Sí a las religiones que humanizan. No a las religiones violentas y destructivas.
Sí a los hombres y mujeres que quieren un mundo mejor. No a quiénes van a lo suyo.
Sí a la gran familia humana. No a los nacionalismos miopes.
Sí al perdón y la concordia. No al rencor y 'el ojo por ojo'.
Sí a la buena vecindad. No 'a cada cual a su bola'.
Sí al planeta que es de todos. No a los muros y fronteras.


Sí a la alimentación compartida: No a los personas que se mueren de hambre.


Sí a la responsabilidad personal. No al abuso irresponsable.

Sí a la VIDA. No a la pena de muerte, al aborto, al terrorismo y a la eutanasia.

domingo, 25 de diciembre de 2011

JESÚS DE NAZARET: EL HOMBRE NUEVO


La humanidad tiene futuro. Nuestro destino no es el fracaso. El 'proyecto humano' goza de sentido. El nacimiento de Jesús, cuyo aniversario celebramos, nos abre las puertas de la esperanza de par en par. La apuesta de Dios por el ser humano, haciéndose uno de nosotros, favorece un camino de esperanza para toda la humanidad. Aunque a veces 'reneguemos' nuestra meta es el bien. Es más, Dios nos creó para ser felices. Y Jesús de Nazaret, va a ser el encargado de recordárnoslo.
Con Jesús, se inaugura la Nueva Humanidad. Con Él, se inicia un nuevo camino para realizarse como persona. Su estilo de vida revoluciona la manera de potenciar al ser humano. Jesús irrumpe en la historia -con las claves- que nos llevan a ser plenamente hombres y plenamente mujeres.
La vida de Jesús: sus enseñanzas, su testimonio, sus denuncias, sus milagros, su manera de estar en el mundo, su cercanía con los pobres, con los enfermos, con los niños, con las mujeres, con los excluidos, hasta con los ricos, nos indican la senda a seguir.
Las Bienaventuranzas nos describen su personalidad. En ellas nos encontramos su proyecto vital. Su mensaje, del Reinado de Dios, es una provocación, una denuncia. Desenmascara todas nuestras hipocresías, desvíos, indiferencias y egoísmos. No tiene reparos, ni miedo al proclamar:
  1. Que la verdad nos hará libres.
  2. Que debemos perdonar -hasta- setenta veces siete.
  3. Que hay que amar a nuestros enemigos.
  4. Que somos felices cuando tenemos hambre y sed de justicia.
  5. Que tenemos que ser constructores de paz.
  6. Que hay más felicidad en dar que en recibir.
  7. Que las leyes están al servicio del ser humano.
  8. Que los últimos serán los primeros
  9. Que no se puede elegir a Dios y al Dinero.
  10. Que nadie tiene mayor amor que aquél que da la vida por sus amigos.
  11. Que nos amemos unos a otros como Él nos amó.
  12. Y que si queremos seguirle, lo encontraremos: en los pobres, los enfermos, los inmigrantes, los encarcelados, los desnudos, los sedientos, los hambrientos y los últimos de este mundo.
Esta es la novedad de Jesús. Del Niño que nació en Belén. Del hombre que no dudó en llegar hasta el final, entregando su vida, en su empeño por poner las cosas en su sitio. Aquí radica la alternativa - de felicidad - de Jesús de Nazaret. Este es el modelo de persona que nos propone, puesto que, Él, es el Camino, la Verdad y la Vida. ¡Gracias!
Hoy, una vez más, habrá que cantarle: !Cumpleaños feliz...!

Fraternalmente, Juan Bautista de las Heras Millán.


domingo, 18 de diciembre de 2011

LOS SERES HUMANOS: DEPREDADORES CONSCIENTES

"El hombre es un lobo para el hombre", desde la antigüedad, lo han afirmado algunos filósofos. Y no están muy descaminados. Aunque, a mi modo de entender, afirman la verdad a medias. Sin embargo, estoy con ellos: El ser humano es un auténtico depredador... pero consciente, a sabiendas de lo que hace y porqué lo hace.
A nadie se le oculta una realidad tan cruel y escalofriante. Llevado por su egoísmo, envidia, usura, odio, venganza, etc., etc., el ser humano, es capaz de matar, de robar, de violar, de machacar a sus semejantes. Su avaricia organiza guerras, desastres humanitarios, genocidios, rabiosas masacres; para que seguir. La historia rebosa, lamentablemente, de tales hechos y circunstancias.
Para qué lo vamos a negar, pasamos de héroes a villanos, en cuestión de milésimas de segundo. Nuestra naturaleza humana está hecha, también, de estas conductas y comportamientos. Estamos inclinados a ellos y son inevitables. Mucho 'control' hay que tener para no dejarse llevar por nuestra condición depredadora.
Por cierto, no pienso en las guerras de Irak, o tribus africanas, o pueblos yugoslavos, o terrorismo internacional, o en los narcotraficantes, o en especuladores perversos,... no, no solo ellos. No hace falta irse tan lejos. En nuestros círculos familiares, en el grupo de amistades, en nuestros espacios laborales, aunque a pequeña escala, reproducimos los mismos esquemas. Es más, echemos una mirada a nuestra realidad personal, que cada cual, inspeccione sus interioridades ¿qué encuentra? No, no hay que irse tan lejos.
Las fieras matan por instinto, un león, no se plantea si mata o no mata a un ciervo. Lo mata, ¡Y ya está! El ser humano, sí tiene la posibilidad de elegir. Sí puede controlar su odio, su agresividad, su violencia, su egoísmo, su avaricia, su impulso asesino... tiene conciencia. Tenemos conciencia. Las fieras no tienen conciencia, solo tienen instinto. Ésta es la diferencia con ellas. Por eso hablo de depredadores conscientes. Depredadores, sí, pero con conciencia.
La historia la hemos ido escribiendo con imágenes que nos han ayudado a explicar esta dualidad, como dos dinamismos, que se dan en la naturaleza humana: Dios y Satanás, el bien y el mal, ángeles y demonios, pecado y santidad, odio y amor,... y en la filosofía oriental se habla de dos fuerzas que rigen nuestras vidas el Yin y el Yan. Por lo visto el 'arte' está en armonizarlas.
El caso, es que todo el mundo coincide, que ambas realidades forman parte constitutiva de nuestro ser. Nacemos con ellas y morimos con ellas. No podemos eliminar, pero sí potenciar o, en su caso, controlar. Termino con una historia que escuché por tierras mexicanas:

Una mañana un viejo Cherokee, le contó a su nieto acerca de una batalla que ocurre en el interior de las personas. El dijo, "Hijo mío, la batalla es entre dos lobos dentro de todos nosotros.

"Uno es Malvado - Es ira, envidia, celos, tristeza, pesar, avaricia, arrogancia, autocompasión, culpa, resentimiento, inferioridad, mentiras, falso orgullo, superioridad y ego.

"El otro es Bueno - Es alegría, paz amor, esperanza, serenidad, humildad, bondad, benevolencia, empatía, generosidad, verdad, compasión y fe."

El nieto lo meditó por un minuto y luego preguntó a su abuelo: “¿Qué lobo gana?”El viejo Cherokee respondió: "Aquél al que tú alimentes."

domingo, 11 de diciembre de 2011

ADVIENTO Y DERECHOS HUMANOS

Hacia el siglo VIII, antes de Cristo, el profeta Isaías, cantaba a la nueva creación con estas hermosas palabras: "Mirad, yo voy a crear un cielo nuevo y una tierra nueva: El lobo y el cordero pastarán juntos, el león con el buey comerá paja. No harán daño ni estrago por todo mi Monte Santo -dice el Señor". Los cristianos, en estos días de Adviento, recordamos a los profetas, que nos invitan a transformar el mundo y, así, disponernos y prepararnos para celebrar el Nacimiento de Jesús.
Coincidiendo en el tiempo, cada 10 de diciembre, recordamos la
Declaración Universal de los Derechos Humanos, en el enunciado del primer derecho, vemos el horizonte de toda ella:"Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos y, dotados como están de razón y conciencia, deben comportarse fraternalmente los unos con los otros."
Podemos decir que el espíritu de Adviento (ámbito religioso) y los Derechos humanos (ámbito civil) van de la mano. Cada cual, desde su espacio de influencia, impulsa un mundo mejor.
En la misma línea, estos días, han entregado el premio nobel de la PAZ, a tres mujeres: la presidenta de Liberia, Ellen Johnson Sirleaf, la también liberiana Leymah Roberta Gbowee y la yemení Tawakul Karman. Coinciden en la no-violencia, como la clave para resolver los conflictos de los pueblos. Una buena noticia, sin duda, para felicitarnos.
Es bueno, que cada año, se nos recuerden todas estas cosas. Aún hay en el ser humano ansias de utopía; no somos conformistas y la rebeldía busca resquicios para 'rebelarse'. El mes de diciembre, digamos, que es el mes de la esperanza; es verdad, que con él terminamos el año, pero su rescoldo nos sirve para avivar el fuego del año que comienza.
Las ONGs, en general, nos recuerdan que aún queda mucho por hacer. Pero no lo dicen para desanimarnos, sino para agradecer a tantas personas, que se hacen eco de sus planes y proyectos y que se empeñan, día a día, por hacer más agradable los hogares, residencias, hospitales, tiendas, escuelas, fábricas, plazas y calles. De esta forma, tanto el tiempo de Adviento cumple su función de preparación de la navidad, como el recuerdo de los Derechos humanos amplían su demarcación, en un mundo que tanto los necesita. Diríamos que existe una complicidad entre estas dos realidades.
Estamos ante un ejemplo en el que 'el espacio religioso' y 'el espacio civil' se identifican y potencian para fortalecer a la humanidad. Y es que con la buena voluntad, el diálogo y el respeto mutuos, se puede caminar -juntos- un buen trecho del camino (tal vez, el camino entero).

domingo, 4 de diciembre de 2011

VOLUNTARIADO: GRATUIDAD, JUSTICIA Y SOLIDARIDAD


El 5 de diciembre, celebramos el Día del Voluntariado.Para más información, estamos acabando el año Europeo del voluntariado. Casi, ni nos hemos enterado. La realidad es que, unos 100 millones, de europeos son voluntarios. Desde aquí nuestra felicitación. Quisiera destacar, de las muchas cosas que se pueden decir, tres dimensiones del voluntariado: Su gratuidad, su empeño por la justicia y su compromiso soidario.
En un mundo, que da a entender que cada cual vaya a su 'bola', que los demás se apañen como puedan y, llegan a decir, "que cada palo aguante su vela"; resulta que hay gente, que dispone de su persona 'gratuitamente' y dedica parte, de su tiempo, a los demás. Son mujeres y hombres sensibles, bondadosos, generosos, que ven la necesidad en sus semejantes y no dudan en acompañarles y ayudarles, en la medida de sus posibilidades.
Se dice, con frecuencia, que no tenemos tiempo para nada. Y yo no me canso de proclamar que hay tiempo para lo que queremos, y en este caso, me estoy refiriendo al ocio y tiempo libre, disponemos de muchas horas para: ver futbol, ir al gimnasio, sentarse horas y horas en la tele o delante el ordenador,... está claro que cada cual dispone de su tiempo, como lo ve conveniente. El hecho es, que las personas voluntarias, reservan parte de su tiempo libre para su voluntariado. Y es que cuando hay voluntad de querer hacer las cosas, pues, se hacen.
Nos podemos preguntar ¿qué les mueve a estas personas voluntarias? Creo que, en general, el rechazo al mundo injusto que vivimos. No soportan las estructuras que explotan a tantos hombres y mujeres, niños y ancianos. Se les cae el 'alma al suelo' con tanto sufrimiento, pobreza, exclusión y marginación. ¡Tanto días internacionales de...! Sin duda anhelan un mundo más justo, más humano, sin discriminaciones. Constatan que, el sistema económico, "echa más leña al fuego" y acrecienta las diferencias y las desigualdades. Que el mundo de la política, no acaba de dar -por diversas razones- con las soluciones, "del bien común", para todos los seres humanos. En fin, que como buscan y tienen su empeño por un mundo más justo, "aportan su granito de arena" con su acción voluntaria.
Por eso podemos afirmar, con rotundidad, que las personas voluntarias son generadoras de una cultura solidaria. Su solidaridad, es la respuesta -sin ostentaciones- para crear una red social que va tejiendo, a lo largo y lo ancho, de este planeta, las condiciones de un mundo en el que seamos más iguales, se respeten y cumplan los derechos humanos, nos sintamos y vivamos como hermanos de una gran familia. Por consiguiente, la solidaridad de los voluntarios, construye -poquito a poquito- un mundo de paz y bienestar para todos. (Todos, somos 7.000 millones)
Por cierto, desde la experiencia, puedo afirmar que ser voluntario te ayuda a crecer como persona, te hace más feliz y, estás contribuyendo, al crecimiento de las personas y a su felicidad.

¡DIFERENTES ASOCIACIONES, ONGs, INSTITUCIONES... TIENEN SUS PUERTAS ABIERTAS!

domingo, 27 de noviembre de 2011

VIVIR RÁPIDO


En una ocasión escuché estos versos: “Vive rápido, muere joven y tendrás un cadáver bonito”. Me llamaron tanto la atención que se me quedaron en 'el disco duro'. Lo cierto es que vivimos demasiado rápido y, a mi modo de entender, asimilamos poco. Mejor dicho, saboreamos poco de la vida. La vida, lo único que tenemos y, da la impresión, que no la gobernamos o administramos bien. Vivimos acelerados, incluso, atropelladamente.

En poco tiempo, nos ocurren muchas cosas, y algunas de ellas muy importantes, y sin embargo, no da tiempo a que 'calen', se sedimenten, formen parte de nuestra existencia. Los entendidos dicen que el buen vino, necesita su tiempo y los años le dan más valor. Y ahora, en poco tiempo, queremos que ya estén las cosas, en su punto, como 'Dios manda'. Pero no les damos el tiempo, suficiente, para que se hagan en su plenitud.

Estamos hablando con alguien, que nos hemos encontrado en la calle, y antes de terminar el saludo, ya hacemos el ademán de irnos y despedirnos: ¡Es que tenemos prisa! Muchas relaciones interpersonales, de pareja -por ejemplo- no han tenido 'su tiempo' para solidificarse. Todo ha ido tan rápido, y tan de prisa que los vínculos se han cogido con alfileres.

No nos tienen que extrañar las conductas de estrés, de ansiedad, de angustia. En todas estas cosas, algo tiene que ver, sin duda, la rapidez con la que vivimos. No le damos tiempo al cuerpo y al espíritu para que se familiarice con lo que estamos viviendo. A nuestro ser más profundo, no llegan las cosas y si llegan, van desdibujadas. Vivimos, con bastante frecuencia, en la superficie de nuestra existencia, y falta la hondura que nos hace madurar con solidez. Las raíces de un árbol le dan alimento, estabilidad, fuerza,... No sé si damos suficiente tiempo a nuestra vida para que esté bien enraizada.

El otro día me paseé por un barrio, y había un grupo de mujeres, en la calle, cantando el bingo, ¡cómo disfrutaban! Da gusto ver a los niños jugar en el parque; a los adolescentes hablar y hablar en sus espacios favoritos; a las personas mayores, sentadas en el banco, repitiendo las historias de siempre. Muchos tenemos la experiencia, gratificante, cuando dedicamos tiempo a pasear, a leer, a escuchar música,... pero sin prisas. Dejar pasar el tiempo, incluso 'perder' el tiempo. Creo que es sano.

Vivir menos rápido nos vendría mejor.


domingo, 20 de noviembre de 2011

¡MUJERES Y NIÑOS PRIMERO!


El origen de la frase está en el naufragio de un barco inglés, en el que el capitán, ordenó que fueran las mujeres y los niños, los primeros en salvarse. Frase que me viene, como anillo al dedo, para la reflexión de hoy. Aunque como veremos el sentido es diferente.
Hoy, día 20 de noviembre, celebramos el Día Universal del Niño y el día 25, el próximo viernes, celebraremos el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. Dos fechas muy cercanas, para recordarnos que aún debemos avanzar en la defensa de la mujer y de la infancia.
Y como –lamentable- ejemplo, el miércoles pasado, día 16, saltaba a los medios informativos, que la Audiencia de Teruel, condenaba a la cárcel, a unos padres de Gambia, por haber realizado la ablación del clítoris a su hija. Para el tribunal, "resulta evidente que para la sociedad española la ablación del clítoris supone una de las prácticas más detestables que puede realizar una sociedad contra sus niñas, pues va en contra de la dignidad de las mujeres y de sus derechos como persona".
Ya sabemos que hay mujeres que ejercen la violencia de género y, también, niños que son violentos y verdaderos ‘tiranos’ con el mundo que les rodea, pero estos casos, no invalidan los Días Internacionales señalados.
La indefensión y desprotección de la mujer y la infancia, están de sobra probados en muchos lugares de este planeta. Todos podemos poner ejemplos cercanos y lejanos. Pero de nada sirven los sentimentalismos y lamentaciones. Ni es bueno recrearse con el mal ajeno, aunque el ‘morbo’ nos incline a ello.
Tenemos la suerte de vivir en una época histórica, en la que hay suficientes recursos humanos y materiales para erradicar los infanticidios, la explotación de la infancia, la prostitución infantil, el tráfico de menores, la trata de blancas, las agresiones y malos tratos de género, las muertes ‘domésticas’, las mutilaciones femeninas, … (Se pueden añadir más ‘historias’)
Pero, también, tenemos recursos y la oportunidad de tratarnos como personas, -todas-hombres y mujeres, ancianos y niños, de ser respetuosos, tolerantes, pacíficos, solidarios, cariñosos, dialogantes,… tratándonos de igual a igual, hombres y mujeres, como miembros de la misma familia humana que somos.
En todos estos buenos deseos, no partimos de cero. Ya llevamos un camino recorrido. Tenemos más conciencia de lo que debemos hacer. Pero, como decían algunos teóricos latinoamericanos del siglo pasado, de la concienciación hay que dar el paso a la ‘concientización’ o sea, ponerse manos a la obra.
Si aún, en el lenguaje coloquial, seguimos diciendo aquello de “las mujeres y niños primero”, sea por deferencia o educación, o por un cuidado más necesario, en el caso de los niños. Pero que no lo relacionemos con el trato indigno, que se da a las mujeres y a los niños, por ser más indefensos.