Esperando en la Gruta de las Maravilllas, de Aracena, (Huelva) he escuchado a una señora, que su amiga, dejó a su pareja, a los 70 años, porque ya no funcionaban sus relaciones. De vez en cuando salen noticias de rupturas de parejas, que se
traducen en separaciones y divorcios. En bastantes casos son los hijos
los que sufren ‘los platos rotos’ y, en la mayoría de las ocasiones, ha
sido la pareja la que no ha puesto todos los medios y recursos para
seguir creciendo como pareja y fortalecerse.
Hace unos años me reuní con un grupo de mujeres y me dijeron lo que para ellas era importante en la vida de una pareja, unos días después, les presenté un escrito en el que redacté sus respuestas. A lo mejor, aún, puede ser de utilidad para los días que vivimos.
1. Se forma una pareja con el único propósito de ser felices juntos. Y es que lo primero y fundamental en una pareja es que ambos se quieran y se amen de verdad. Esto es lo que les hará felices.
2. Desde el marco de un Proyecto de pareja se sitúa la historia común que desean para los dos y para la futura familia que se forme.
3. Hay que asumir la propia historia y la historia del otro miembro de la pareja, para eso hay que contarla. En este sentido la comunicación y el diálogo deben de ser fluidos. Hablar no cuesta nada y hablando se entiende y conoce la gente.
4. El trabajo responsable, dentro y fuera de la casa, es una obligación de los dos que contribuye al bienestar de la pareja y a la propia realización personal.
5. En cuanto al asunto económico: hay que ajustarse al dinero que se dispone y no vivir por encima de las posibilidades que se tiene.
6. El respeto debe de ser mutuo, sin respeto no hay convivencia, armonía y paz. Es imprescindible evitar todo tipo de violencia verbal, física o de otro género, todas las personas tenemos nuestra dignidad que debe ser respetada. La falta de respeto trae tensiones, violencia, ruptura,...
7. Los pequeños detalles de cariño y ternura: un beso, coger de la mano, una palabra cariñosa, una sonrisa,... construyen el amor y superan la inevitable rutina y monotonía de todos los días.
8. Los problemas, tensiones, conflictos, roces, enfados y cabreos, son inevitables en la convivencia de las personas, cuanto más en la vida de una pareja que está las 24 horas del día juntas. La paciencia, el aguante y el perdón son las medicinas apropiadas para superarlas.
9. Quererse, todos los días, pese a la monotonía, “el siempre igual”, el paso del tiempo, o el cansancio, supone creatividad, imaginación y para ello mantener el tipo; a veces, hay que poner buena cara porque el otro miembro de la pareja ese día lo necesita,...
10. La mentira, el engaño, las verdades a medias, el ocultamiento por miedo, complejos o vergüenza, son el inicio de numerosos conflictos, problemas y separaciones. La verdad siempre por delante aunque cueste decirla.
11. Creer en el mismo Dios, Él estará presente en vuestros proyectos y si seguís su Voluntad, llenará de sentido vuestras vidas y os guiará por este mundo lleno de dificultades, pero también de posibilidades.
12. Y cuando vengan los hijos, frutos de vuestro amor, se encontrarán un hogar de paz, armonía, alegría y respeto y crecerán como personas libres que buscarán la felicidad como su madre y su padre.
Hace unos años me reuní con un grupo de mujeres y me dijeron lo que para ellas era importante en la vida de una pareja, unos días después, les presenté un escrito en el que redacté sus respuestas. A lo mejor, aún, puede ser de utilidad para los días que vivimos.
1. Se forma una pareja con el único propósito de ser felices juntos. Y es que lo primero y fundamental en una pareja es que ambos se quieran y se amen de verdad. Esto es lo que les hará felices.
2. Desde el marco de un Proyecto de pareja se sitúa la historia común que desean para los dos y para la futura familia que se forme.
3. Hay que asumir la propia historia y la historia del otro miembro de la pareja, para eso hay que contarla. En este sentido la comunicación y el diálogo deben de ser fluidos. Hablar no cuesta nada y hablando se entiende y conoce la gente.
4. El trabajo responsable, dentro y fuera de la casa, es una obligación de los dos que contribuye al bienestar de la pareja y a la propia realización personal.
5. En cuanto al asunto económico: hay que ajustarse al dinero que se dispone y no vivir por encima de las posibilidades que se tiene.
6. El respeto debe de ser mutuo, sin respeto no hay convivencia, armonía y paz. Es imprescindible evitar todo tipo de violencia verbal, física o de otro género, todas las personas tenemos nuestra dignidad que debe ser respetada. La falta de respeto trae tensiones, violencia, ruptura,...
7. Los pequeños detalles de cariño y ternura: un beso, coger de la mano, una palabra cariñosa, una sonrisa,... construyen el amor y superan la inevitable rutina y monotonía de todos los días.
8. Los problemas, tensiones, conflictos, roces, enfados y cabreos, son inevitables en la convivencia de las personas, cuanto más en la vida de una pareja que está las 24 horas del día juntas. La paciencia, el aguante y el perdón son las medicinas apropiadas para superarlas.
9. Quererse, todos los días, pese a la monotonía, “el siempre igual”, el paso del tiempo, o el cansancio, supone creatividad, imaginación y para ello mantener el tipo; a veces, hay que poner buena cara porque el otro miembro de la pareja ese día lo necesita,...
10. La mentira, el engaño, las verdades a medias, el ocultamiento por miedo, complejos o vergüenza, son el inicio de numerosos conflictos, problemas y separaciones. La verdad siempre por delante aunque cueste decirla.
11. Creer en el mismo Dios, Él estará presente en vuestros proyectos y si seguís su Voluntad, llenará de sentido vuestras vidas y os guiará por este mundo lleno de dificultades, pero también de posibilidades.
12. Y cuando vengan los hijos, frutos de vuestro amor, se encontrarán un hogar de paz, armonía, alegría y respeto y crecerán como personas libres que buscarán la felicidad como su madre y su padre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario