44, Mujeres, 44 Personas, 44 Seres humanos ya no
están con nosotros. En España, son 44 las víctimas por violencia de género. Y
aún no ha terminado el año.
Simplemente indignante. Todos los años la misma y lamentable cantinela.
Parece que en el paisaje de la sociedad y, no solo de la española, la muerte de
la mujer a manos de su pareja ya es normal. Y lo preocupante es que, el maltrato a la mujer, empieza a edades más tempranas. En los últimos tiempos hay denuncias de adolescentes.
Nos dice la Organización Mundial para la Salud, que “la violencia de género es la principal causa
de muerte entre las mujeres de entre 15 y 44 años, en todo el mundo, por
delante de la suma de muertes provocadas por el cáncer, la malaria, los
accidentes de tráfico y las guerras”. Y la ONU sigue denunciando, cada año, “que tres de cada cuatro mujeres en el mundo han sufrido
alguna vez en su vida violencia machista”.
Para situarnos, veamos los orígenes de la fecha para el recuerdo de las víctimas: El 17 de diciembre de 1999, a través de la resolución 54/134, la Asamblea General, declaró el 25 de noviembre, como el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer,
e invitó a los gobiernos, las organizaciones internacionales y las
organizaciones no gubernamentales a que organicen, en ese día, actividades
dirigidas a sensibilizar y concienciar, a la opinión pública, respecto al
problema de la violencia contra la mujer. Tenemos que remontarnos a 1981,
cuando un grupo militante de mujeres, proponen el 25 de noviembre como el día
contra la violencia. La fecha fue elegida en conmemoración del brutal
asesinato, en 1960, de las tres hermanas Mirabal, activistas políticas de la
República Dominicana, por orden del gobernante y dictador dominicano Rafael
Trujillo.
Todos sabemos de lo que va el problema y siempre será poco lo que hagamos para educarnos en
el respeto a la mujer. Por las circunstancias de mi trabajo, en años
anteriores, he tenido que intervenir en casos de maltrato a varias mujeres. No
es nada fácil y, sobretodo, cuando tienes que tratar directamente con el
maltratador. Desde luego, la mujer queda muy marcada y, por mucho que se esfuerza, queda muy afectada para siempre.
Se están haciendo grandes esfuerzos para erradicar este grave y lamentable problema – que
se da a nivel mundial – no olvidemos que la mitad de la humanidad son mujeres
y, en este caso, como en otros muchos se siguen llevando la peor parte.
Sigo pensando que no solo las mujeres están implicadas en la solución de este asunto, nos
corresponde también a los hombres trabajar para que se logre superarlo. En la
familia, en la escuela, en las iglesias, sinagogas, mezquitas,… hay que luchar
por solucionar esta lacra de la humanidad que se lleva a tantas mujeres cada
año. Y he hecho referencia a las religiones, porque creo que son uno de los
factores que históricamente han contribuido al machismo violento. Ya sé que se
dan otras causas familiares, sociales, culturales y económicas, pues todo este
asunto es más complejo de lo que a simple vista aparece.
No obstante, he querido dejar constancia de las
religiones, porque
tienen la fuerza de contribuir a que la igualdad, entre los hombres y las mujeres, se
haga realidad, finalmente. No debemos olvidar que para todas las religiones, todos los seres humanos somos iguales, ya que fuimos creados a imagen de Dios y al ser
sus hijos e hijas, también somos hermanas y hermanos.
En fin, sean estas humildes palabras, un homenaje a
tantas mujeres que nos han dejado, por culpa de sus parejas, a lo largo y lo
ancho de este mundo que habitamos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario